Un sólido plan de negocios basado en un correcto diagnóstico y una ruta detallada de los hechos a realizar puede ser el gran diferenciador entre un una marca exitosa y un proyecto empresarial destinado al fracaso. Más que avanzar basándose en las suposiciones o tomar decisiones intuitivas e impulsivas, es necesario desarrollar una clara comprensión del mercado y de la competencia para trazar una buena propuesta de valor diferencial. Veamos las 10 cosas sorprendentes que tu planificación estratégica debe incluir.
La pregunta más importante para las empresas es si su plan de negocios está haciendo todo lo posible para ser escalable, rentable, predecible y apto para manejar eventos inesperados. El error que cometen muchas de las firmas, incluso las grandes y de larga trayectoria, es tomar una plantilla genérica de planificación y luego ir completando paso a paso esos casilleros como si solo bastara con replicar un modelo universal.
Sin embargo, las empresas que hacen historia son aquellas lo suficientemente audaces como para ir más allá de los cánones ya tan vistos en el ecosistema digital. Y en esta fase de riesgo y apuesta, por supuesto que muchas cosas pueden salir mal, pero esto no es un limitante o determinante si se cuenta con un programa de acción proactivo y reactivo al mismo tiempo.
Elementos imprescindibles de un plan de negocios
En Sandiamedia partimos de un diagnóstico bien puntilloso y de una escucha bien atenta de nuestros clientes para comprender su propuesta de valor actual y sus diferenciales, pudiendo luego enfocarnos en lo que sabemos hacer: construir activos digitales y convertirlos en resultados comerciales.
Para lograrlo, por supuesto que es innegable partir de un clásico plan de negocios: una documentación que nos permita reunir los objetivos de la empresa, las estrategias para alcanzarlos, la metodología de comunicación interna, los procedimientos de comercialización, la estructura de la organización, el monto de inversión que se dispone y la facturación que se está alcanzando.
Partiendo de lo simple y elemental, un plan de negocios debe incluir determinados aspectos clave: la definición del concepto y su posicionamiento diferencial (desde dónde se posicionará la marca), qué productos o servicios se ofrecen, a qué público está dirigida la oferta, quiénes son los competidores que hay en el mercado, cuántos recursos y de qué seniority se necesitan para iniciar las operaciones, cómo se invertirá el dinero, tiempo y personal, y cuál es el margen de utilidad que se busca obtener.
Contrario a lo que algunos gerentes, CEOs o emprendedores imaginan, desarrollar un plan de negocios resulta menos complicado de lo que parece. Lo importante es ser consciente de que cada proyecto es diferente, y que por tanto, necesita tener bien en claro cada uno de sus elementos esenciales:
- ADN de marca: Incluye el nombre de la empresa, así como la misión, visión, valores y una descripción de las ventajas competitivas del negocio.
- Estructura del entorno: Conocido como Matriz FODA, se realiza un análisis de las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de la empresa, así como del comportamiento del sector en el que se desarrolla, las tendencias del mercado, la situación de la competencia y el estadío de los potenciales clientes.
- Plan de acción: Conocidas tradicionalmente como las 4 «P» del Marketing, este apartado del plan enlista las estrategias del Producto, Precio, Punto de venta o distribución y Promoción; es decir qué acciones hay que ejecutar para lograr el éxito del negocio.
- Esquema financiero y de inversión: Es el punto esencial ya que pone a prueba, con sólido basamento en cálculos y proyección de escenarios posibles, la viabilidad de la idea, la rentabilidad económica, y si generará un margen de utilidad con retorno de inversión.
- Recursos humanos: Por más automatizados que se hayan vuelto muchos de los procesos, lo cierto es que los procedimientos mecánicos lejos de desplazar a los humanos necesitan más que nunca del personal creativo y astuto para agregar valor diferencial; siendo necesaria la definición de cada uno de los puestos de trabajo que se deben cubrir, junto a las responsabilidades y obligaciones de los miembros que integran la organización.
10 claves de acción que no puedes desestimar en tu plan de negocios
Una vez que tengas allanadas las cinco estructuras básicas que Sandiamedia acaba de recordarte dentro de tu plan de negocios, podrás sacarle mayor provecho con una ejecución sorprendente. Y para ello, ¡nada mejor que estas 10 vías de acción tan inesperadas como fructíferas!
1- Reconocer la existencia de la competencia
Si solo te centras en ti mismo al momento de desarrollar un plan de negocios, ¡estarás cometiendo un error abismal! Tu empresa debe abordar lo más minuciosamente posible a sus competidores para luego plantear una línea de acción que te diferencie con excelencia. Esfuérzate por identificar factores comunes y distánciate de ellos con propuestas superadoras.
2- Valorar la innovación desde un comienzo
Si tu empresa es de las que se jacta por ser moderna, avanzada, a la vanguardia y siempre actualizada, todos los recursos involucrados deben valoran la novedad como un elemento prioritario, y hacerlo desde el principio del plan para destacarse inicialmente como una firma original y en continuo perfeccionamiento. Al ser la innovación un componente crítico dentro de la planificación, el proceso se alejará de lo accidental para aferrarse a una clara intencionalidad innovadora.
3- Contar con un plan de contingencia
Es altamente improbable, por no decir imposible, que todas las acciones sigan el curso natural de acuerdo al plan de negocios. Es menester que como director o líder tengas un «proyecto de contingencia» que te permita hacer los cambios necesarios en caso de que surja algo no previsto. Para que tu empresa haga frente a estas eventualidades que pueden ser por razones internas o externas a la organización, es necesario que tengas en mente un plan B; es decir, un conjunto de procedimientos alternativos a la operatividad normal hasta resolver la emergencia.
4- Estar preparado para el éxito
Así como hay que estar listo para fallar, ¡también para ganar! Tu plan de negocios debe dar cuenta de los escenarios normales pero también de las grandes y exitosas pasarelas. Si tu empresa no se prepara para el éxito, por más inesperado o predecible que sea, como gerente o empresario te verás obligado a rehacer nuevamente todo tu plan.
5- Esquematizar al Buyer Persona
Un típico plan de negocios proyecta su audiencia objetivo basándose, generalmente, en términos de información demográfica como es la edad, el sexo y el nivel de ingreso de los usuarios. Sin embargo, una planificación exitosa debe definir a sus potenciales clientes por factores más enriquecedores y reveladores como son el estilo de vida, las necesidades, los hábitos de consumo, las ambiciones y las expectativas.
En este sentido, te será útil definir al Buyer Persona de tu negocio; es decir, establecer una representación imaginaria de tu comprador ideal. Sobre la base de los datos cualitativos y cuantitativos puedes analizar la distancia entre para quién realmente está diseñado tu producto y quiénes son tus consumidores actuales. Esto te dará la oportunidad de mejorar tus resultados de performance, perfilar mejor las estrategias y perfeccionar la comunicación sobre tu servicio.
6- Trazar una estrategia de Content Marketing
Los mensajes que transmite o publica la compañía son la fuerza dominante en la comercialización de un producto o servicio, la participación e involucramiento de los clientes y la decisión de compra. Dentro de tu plan de negocios, es necesario que incluyas una sección entera dedicada a la planificación, producción y distribución de los contenidos como parte de los esfuerzos del departamento de Marketing si quieres atraer y convertir clientes.
Y con esto nos referimos a todos los contenidos posibles: redes sociales, campañas de email marketing, artículos de blogging, landing pages, estudios y casos de éxito, piezas de gamificación, videos, infografías, checklist, ebooks y reportes. Cuanto más producción tengas, más autoridad, visibilidad, tráfico, referencias, engagement, viralidad y reputación alcanzará tu firma.
7- Estimular la participación de los empleados
Así tengas 1, 10, 100 o 1000 empleados, debes explicarles lo más detallado y estimulante posible porqué necesitas de su compromiso, cuáles son sus responsabilidades, de qué derechos y permisos pueden hacer uso, y de qué manera será fundamental el aporte de sus habilidades. Si ellos se sienten motivados y parte de tu plan de negocios, ese bienestar se trasladará a la energía positiva y productiva de toda la compañía, lográndose un mejor desempeño de los recursos y una reducción de los roces, malos entendidos y fugas de talentos.
A medida que tu compañía vaya creciendo, piensa en recompensar a los empleados clave que lo han hecho posible. Si tienes más inversores interesados, mayores alianzas, mejores partners, más casos de éxito dentro de tu portfolio y mayor facturación anual, destaca la calidad de tus profesionales y dales el protagonismo que merecen para que se sientan orgullosos de ser parte de tu propuesta.
8- Planificar la salida, reconversión o giro del negocio
Aunque seguramente sea la última cosa que quieras tener en mente al iniciar tu proyecto, proporcionar una estrategia de salida puede ser de gran ayuda si decides vender la compañía más adelante, abrirla a concurso o adquisición pública, fusionarla con otra firma, ajustar la propuesta de sus productos o aventurarte a trazar otra línea rentable de negocio.
9- Establecer una manera inteligente de implementación
A menudo, cuando se termina el proceso de planificación, el equipo se agota de tanto esquema y se agobia antes de poder llevarlo a la práctica, siendo muy frecuente la tendencia a volver a hacer las cosas de la manera en que se venían haciendo, con sus errores y vicios.
Uno de los desafíos clave para las empresas es realmente la implementación de su plan estratégico. Una cosa es leer artículos, consultar a expertos, seguir el caso de éxito de una compañía internacional o hasta incluso contar con el mejor director operativo, pero lo cierto es que todo plan de negocios debe incluir una página destacada que establezca la política interna y particular de la empresa; es decir, una guía de implementación personalísima e intransferible.
10- Comprometer a los involucrados a que continúen el plan
Por más plan de negocios excelentemente elaborado y minuciosamente detallado que tengas, si tus empleados, no se adhieren a él con convicción, difícilmente puedas alcanzar cada uno de los objetivos que en él has incluído. ¡Asegúrate de que cuentas con su palabra y compromiso para llevar adelante esta planificación estratégica!
El incumplimiento de esta entrega y compromiso puede conducirte directamente al fracaso inesperado porque te estará faltando lo más esencial e irremplazable de esta estrategia: el enfoque personal de tus recursos.
Ahora sí, tienes todos los pasos esenciales y los puntos diferenciales más avanzados para trabajar en equipo hacia la consecución de los objetivos. Recuerda que para obtener buenos resultados comerciales, un plan de negocios te dará las claves de la factibilidad y viabilidad para hacerlo posible con la mayor rentabilidad, el menor desgaste de recursos y una reducción de costos innecesarios.